domingo, 13 de septiembre de 2015

La pérdida




El destino está por venir,
y ocultarte vagamente en la obscuridad de tus pensamientos será tu único refugio,

dejándote susurrar por la fría voz de la desesperación
que ahoga tus suspiros en un mar de palabras sin sentido
y que matan con furia todo el sentido de la vida.
El calor de sus brazos es tan efímero como la brisa que acariciaba sus cabellos y las lágrimas que bañan sus recuerdos,
recuerdos que son la mirada de un millar de ilusiones que un día fueron promesas
y que hoy no son mas que un vano recuerdo de un amor que no volverá.

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